Está compuesto de un núcleo formado por un elemento resistivo, que está recubierto de un material aislante y transmisor de calor ( silicona o PVC) También se hacen recubrimientos combinando los anteriores con fibra de vidrio o malla metálica.
Su uso está indicado para todo proceso que requiera un calentamiento suave.
La presentación y el acabado del cable calefactor, va a depender del uso al que esté destinado. He aquí algunas de las aplicaciones más representativas:
Las resistencias anti-condesación colocadas en vitrinas y expositores frigoríficos, se utilizan para evitar la condensación en su interior. Son fabricadas a medida y con diferentes acabados.
Resistencias de congelación para colocar en lugares donde se quiera evitar la presencia de hielo (frigoríficos, puertas de congeladores, tuberías, rampas de garaje, accesos a viviendas, autopistas, aeropuertos, etc). Se pueden suministrar en láminas de aluminio autoadhesivas, introducidas en tubo de aluminio.
Resistencias para espejos para evitar la condensación en los mismos. Colocadas en láminas de aluminio autoadhesivas que se pegan en la parte posterior de los espejos.
Resistencias de carter para compresores para mantenerlos a su temperatura de trabajo. Van provistas de un muelle que facilita su adaptación.
Resistencias para la fermentación del vino, se utilizan para ayudar en la fermentación del vino, y se suministran montadas en una caja con termostato.
Suelo radiante, colocado bajo los suelos o en paredes, se usa para el calentamiento de cualquier tipo de superficie (viviendas, granjas, invernaderos, etc)
Se suministra el material en rollos o carretes.
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